La leyenda de cuando el Cádiz CF ganó en Tenerife sin tirar ni una sola vez a puerta

En la temporada 1989/90, el Cádiz CF hacía honores a su sobrenombre de “Submarino Amarillo” cuando, después de haber estado gran parte de la temporada hundido en zona de descenso, terminaba emergiendo y logrando la permanencia en Primera División (la quinta consecutiva), tras ganar los cuatro últimos partidos.

Y los cuatro con el mismo resultado: 0 a 1 / 1 a 10.

En Vallecas ante el Rayo Vallecano con un gol de Husillos.

En Carranza ante la Real Sociedad, con otro gol de Husillos.

En Tenerife con un gol en propia puerta de Manolo Hierro.

Y de nuevo en Carranza ante el RC Celta con un gol de Manolito.

La gesta se convirtió en leyenda, incluso con el añadido de que en el partido en el Heilodoro Rodríguez López tinerfeño se hizo lo nunca antes visto: ganar el partido sin haber lanzado ni una sola vez a puerta, por aquello de que el gol se lo marcaron ellos mismos.

Como toda leyenda tiene su parte de fantasía, pues no es cierto eso de que el Cádiz CF no lanzase ni una sola vez a puerta en todo el partido.

La realidad testifica que mediada la segunda mitad, hubo una internada por banda derecha de Raúl Procopio (que había entrado sustituyendo a Poli) que terminó en un lanzamiento que atajó sin mayor dificultad el meta Belza.

Tiro a puerta del Cádiz CF en Tenerife en la 1989:90, obra de Raúl Procopio