La “obstrucción” en fútbol, considerada como obstaculización del movimiento de un adversario, es falta, sancionada con tiro libre directo o indirecto, según haya contacto físico o no, como así se recoge en la Regla 12 (“Faltas y Conducta Incorrecta”) de las Reglas de Juego de la IFAB (International Board) de aplicación FIFA.
La nueva redacción de las Reglas del Juego 2016-17 establece un cambio importante al respecto. Hasta ahora, la “obstrucción” se trataba sólo en el apartado 2 de la Regla 12 (“Faltas e Incorrecciones”), relativo al “Tiro Libre Indirecto”; pero ahora se introduce también en el apartado 1 relativo al “Tiro Libre Directo”, considerando la “obstrucción” que conlleve contacto físico. Por otro lado, la nueva redacción también introduce algunos matices destacables y clarificadores.
Regla 12 de la IFAB sobre “Faltas y Conducta Incorrecta”
Tras la revisión de las Reglas del Juego realizada por la IFAB, con entrada en vigor a partir del 1 de junio de 2016, se contemplan algunas cosideraciones interesantes respecto a la acción de la “obstrucción”.
Dicha acción viene recogida en la Regla 12, sobre “Faltas y Conducta Incorrecta” (antes llamada “Faltas e Incorrecciones”), recogiendo la “obstrucción” en sus apartados 1 y 2; el 1 relativo al “Tiro Libre Directo” y el 2 al “Tiro Libre Indirecto”.
Así, el texto dice lo siguiente:
Regla 12. Apartado 1:
“Se concederá un Tiro Libre Directo si un jugador obstaculiza a un adversario mediante un contacto físico”.
Hasta ahora no se contemplaba la sanción de la “obstrucción” como “Tiro Libre Directo”.
El atacante sin balón obstruye la acción del defensor para facilitar la acción de su compañero. ¡Falta!
Regla 12. Apartado 2:
“Se concederá un Tiro Libre Indirecto si un jugador obstaculiza el movimiento de un adversario sin que exista un contacto físico”.
Se hacen unas matizaciones a la redacción del texto ahora ahora existente, donde venía redactado de la siguiente manera.
“Se concederá un tiro libre indirecto si un jugador obstaculiza el avance de un adversario”.
Modificaciones a la Regla 12
Con todo ello, las principales modificaciones van en un doble sentido:
La posibilidad de sancionar la “obstrucción” con “Tiro Libre Directo” cuando en la acción se produzca contacto físico.
Las matizaciones al texto.
La obstrucción como “Tiro Libre Directo”
Como se ha comentado, hasta esta temporada 2016-17, la señalada Regla 12 no consideraba en ningún caso la “obstrucción” como “Tiro Libre Directo” (apartado 1), de manera que cualquier “obstaculización del avance de un adversario”, hubiera o no contacto físico, era sancionable como “Tiro Libre Indirecto” (apartado 2).
Ahora, se incluye esta sanción en el apartado 1 de la Regla 12 relativo al “Tiro Libre Directo”.
Esta consideración adquiere una repercusión especial cuando la acción se comete dentro del área, por lo que debería sancionarse como “penalti”. Así pues, a partir de ahora, cualquier “obstrucción” con contacto físico dentro del área deberá ser sancionada con “penalti”, incluyendo la acción del “bloqueo”, como se verá más adelante.
La obstrucción como “Tiro Libre Indirecto”
La otra modificación de la Regla al respecto de la “obstrucción” es referente a algunas pequeñas matizaciones al texto existente en el apartado 2 referente al “Tiro Libre Indirecto”.
Hasta ahora el texto decía:
“Se concederá un tiro libre indirecto si un jugador obstaculiza el avance de un adversario”.
Con la revisión realizada, el texto pasa a ser el siguiente:
“Se concederá un tiro libre indirecto si un jugador obstaculiza el movimiento de un adversario sin que exista un contacto físico”.
Como se comprueba, hay una doble variación:
Se cambia la palabra “avance” por “movimiento”. Así, la “obstrucción” es aplicable a cualquier movimiento del adversario y no necesariamente para evitar un avance.
Se añade “sin que exista un contacto físico”, cosa que antes no se consideraba, pues como se ha dicho, lo hubiera o no, se sancionaba con “Tiro Libre Indirecto”. Ahora es necesario el matiz para diferenciar cuando se sanciona con “Directo” o con “Indirecto”
La “obstrucción” es falta
Al margen de lo establecido en la Regla 12, la propia IFAB explica la consideración de “obstrucción”, entendida como la obstaculización a un contrario.
La explicación textual es la siguiente:
“Obstaculizar el avance de un adversario supone colocarse en el camino del adversario para obstruir, bloquear, ralentizar o forzar a cambiar de dirección a dicho adversario cuando el balón no está a distancia de juego de los jugadores involucrados”.
La explicación resulta bastante clara.
El “bloqueo” es “obstrucción”
El texto sigue aclarando lo siguiente:
“Todos los jugadores tienen derecho a su posición en el terreno de juego; encontrarse en el camino de un adversario no es lo mismo que moverse hacia el camino de un adversario”.
Así pues, si un jugador obstruye a un contrario por su posición natural en el campo, no debe ser sancionado, salvo que se haya movido con la intención de obstruir. Este matiz es importante para aplicar a una de las acciones cada vez más repetidas en el juego: el “bloqueo”, sobre todo en los lanzamientos de córneres.
En aplicación de la regla, parece claro que el “bloqueo” es una acción sancionable, a diferencia de lo que sucede en Baloncesto, donde sí está permitido. En ellas, ya sea el defensor o el atacante, se mueve con la clara intención de “obstaculizar” (bloquear) el movimiento de un adversario, anulándolo de la jugada, con lo que puede facilitar la acción de un compañero, ya sea defensiva o atacante.
En fútbol, no es válido el “bloqueo”. Es sancionable. Y si es en defensa, con penalti.
En cualquier caso, parece que esta consideración es la que deja una grieta abierta a la interpretación, pues queda a criterio del árbitro considerar si la “obstrucción” se produce por “encontrarse en el camino del adversario” o si hay un “movimiento hacia el camino del adversario”.
La “obstrucción” para proteger el balón no es falta
La misma aclaración de la IFAB prosigue para hacer una excepción a la regla general:
“Un jugador que se coloca entre un adversario y el balón por motivos tácticos no cometerá una infracción mientras el balón se halle a distancia de juego y el jugador no retenga a su adversario con los brazos o el cuerpo. Si el balón se hallara a distancia de juego, el adversario puede cargar contra el jugador”.
El jugador obstruye a su adversario, pero para proteger la posesión del balón. ¡Correcto!
Así pues, cuando la “obstrucción” se realiza para proteger la posesión del balón, no debe considerarse como acción sancionable.
La aplicación de la Regla
Pese a la claridad de la regla, ahora más si cabe, es bastante frecuente ver cómo evidentes acciones de “obstrucción” no son sancionadas por los árbitros, posiblemente por considerar que no había intención de ello.
La interpretación de los medios de comunicación
Posiblemente por el desconocimiento de las Reglas del Juego, son muchos los medios de comunicación, afortunadamente no todos, porque en ocasiones suelen asesorarse de entendidos en la materia, que no sólo no consideran como falta una clara acción de “obstrucción”, sino que hasta la avalan. En ocasiones se ha escuchado a algún comentarista deportivo aplaudir una acción de bloqueo en un córner, por considerarla no sólo eficiente, sino absolutamente legal.
https://elfutbolymasalla.com/wp-content/uploads/2016/08/2-obstrucción-balón.jpg545512Manuel Granado Palmahttps://elfutbolymasalla.com/wp-content/uploads/2021/10/logo-efyma.pngManuel Granado Palma2016-08-31 17:45:292016-08-31 20:32:30Falsos Mitos del Fútbol: V La Obstrucción
En este artículo se repasa, con cierta nostalgia, algunos recuerdos del “Fútbol Clásico”, (último tercio del pasado siglo). Cosas del fútbol que se han perdido o han cambiado con la llegada del “Fútbol Moderno” del siglo XXI. Algunos cambios han mejorado el juego, la seguridad o lo medios; pero también se ha perdido algo de la esencia genuina y natural del fútbol de toda la vida. Los más veteranos (y veteranas) seguro que podrán recordar muchas más cosas de las que aquí se exponen; y a ellos (y ellas) invito a aportar su comentario al respecto.
“Odio eterno al Fútbol Moderno. O no”.
¡¡¡¡Qué grandes la FRAC!!!!
En este primer capítulo se recuerdan las siguientes cosas del fútbol que se han perdido.
Cuando el portero era un patoso con los pies.
Cuando se jugaba en campos enfangados.
Cuando las camisetas no llevaban el nombre del jugador, ni tenían un número fijo.
Cuando el portero iba vestido de portero.
Cuando el aficionado no llevaba camiseta del equipo.
Cuando las calzonas marcaban «paquete».
Cuando había «gorditos» y «canijos».
Cuando había que ir temprano para coger sitio.
Cuando la victoria era de dos puntos.
Cuando se marcaban goles en «plancha».
1. Cuando el portero era un patoso con los pies
Fútbol Clásico: Los porteros sólo usaban los pies para pegar un patadón en una situación crítica. Muchos de ellos eran tan «patosos» que ni siquiera sacaban de puerta con el pie y solía bajar un defensa para pegar el patadón, lo que era un riesgo, pues ese defensa imposibilitaba el fuera de juego. Las reglas del juego permitía entonces que el portero cogiera el balón con las manos tras la cesión de un compañero, lo cual era utilizado por los defensas ante la presión de un contrario o para perder tiempo.
Fútbol Moderno: Las modificaciones de las Reglas del Juego hacen que los porteros deban ser muy hábiles en el juego de pies, convirtiéndose, en ocasiones, en un jugador más en el juego de pases, y algunos hasta son hábiles en el regate.
Fútbol Clásico: La calidad del césped dejaba mucho que desear, y los sistemas de riego y drenaje eran bastante obsoletos. Un mismo césped podía durar durante décadas. Esto hacía que a poco que cayeran cuatro gotas, el campo se encharcara, enfangara y embarrara. Pero ya tenía que estar mal para que esto fuese motivo para suspender un partido, prácticamente tenía que hundirse medio cuerpo en el fango. Los partidos jugados en estas condiciones tenían una épica muy especial. Se igualaban las fuerzas entre los equipos grandes, más técnicos, y los pequeños, y se disfrutaba de un espectáculo de fuerza, choque y espectacularidad. Balones que se frenaban o, todo lo contrario, que salían disparados al derrapar sobre un charco de agua. Evidentemente no había jugadas de pase, ni “tiki-taka” ni nada de esto, pero el fútbol es mucho más que eso. En el lado negativo de jugar en estas condiciones estaba las mayor posibilidad de lesiones.
https://www.youtube.com/watch?v=_qbMGqrhWh0
Fútbol Moderno: Actualmente la calidad del césped es mucho mayor. Las condiciones y cuidados del mismo se llevan por empresas profesionales dedicadas exclusivamente a este fin, lo que no impide que en ocasiones también sufran deterioro, aunque no es normal. Y si sufre algún deterioro, enseguida se toman medidas para replantarlo. Mucho tiene que llover para que un campo actual presente un estado de charcos y fango. Y a poco que los haya, lo más normal es que se acuerde la suspensión del partido.
3. Cuando las camisetas no llevaban el nombre del jugador, ni tenían un número fijo y, a veces, ni siquiera escudo
Fútbol Clásico: Los jugadores se equipaban con camisetas sólo con el número (del 1 al 11) y el escudo. No más. Y eso como mucho, pues a veces no llevaban ni escudo.
Fútbol Moderno: Las camisetas, además del número (fijo para cada jugador) y, por supuesto, el escudo, llevan el nombre del jugador (cada vez más completo), el logo de la marca deportiva, todo tipo de publicidad y patrocinios, logos o escudos de las instituciones deportivas organizadoras de la competición y hasta isotipos representativos de títulos.
Reseña histórica: En las primeras décadas del fútbol los jugadores no llevaban absolutamente nada impreso en las camisetas, si acaso el escudo del club bordado. La primera vez que un equipo identificó a cada jugador con un número en la camiseta (espalda) fue en Estados Unidos. Lo hizo en 1924 el Fall River Marksmen durante la disputa de la National Challenge Cup.
No obstante, esta práctica no pasó de anecdótica, pues se considera que el primer equipo que utilizó camisetas numeradas como práctica habitual fue el Arsenal. Lo hizo, a propuesta de su entrenador Herbert Chapman, el 25 de agosto de 1928 visitando Hillsborough para enfrentarse al Wednesday (hoy Sheffield Wednesday) en un partido de la Liga. La idea enseguida fue seguida por otros muchos equipos ingleses, como el propio Wednesday o el Chelsea. Hubo partidos en que los jugadores de un equipo se numeraban del 1 al 11 y el otro del 12 al 22, como en la Final de la FA Cup de 1933 entre el Everton y el Manchester City. Cada número no sólo identificaba a un jugador, sino también su posición en el terreno de juego. A veces el portero no llevaba número, algo que se mantuvo durante muchos años.
Cruyff con la camiseta del Ajax (Campeón de Europa) sin escudo.
La indumentaria deportiva es posiblemente una de las cuestiones que más han evolucionado en el fútbol y que continuamente están cambiando por sometimiento de la comercialización y las modas. Las asignaciones de un número fijo para jugador se estableció por la FIFA a partir del Mundial de 1958, pero en las Ligas nacionales se impuso algo más tarde. No sería hasta la final de la Football League Cup (Copa de la Liga de Inglaterra) de 1992/93 cuando se asignó un número fijo para jugador. A la temporada siguiente, en la temporada 1993/94, se estableció, también en Inglaterra, la numeración fija para la disputa de la Premier League, inlcuyéndose también el apellido del jugador encima del número. En España, la numeración fija y el nombre del jugador en las camisetas se aprobó por la Liga de Fútbol Profesional para la temporada 1995/96. Las consecuencias de esta medida fueron mucho más allá de lo deportivo, pues su principal repercusión fue el impulso a la comercialización de camisetas.
También nos cuesta pensar que los equipos ni siquiera llevaran en las camisetas el escudo. Desde la década de los cuarenta y cincuenta esta costumbre se fue imponiendo, pero tampoco era habitual en todos los equipos, sólo en los más importantes. Era normal que se contase con una equipación, la de «gala», con el escudo, pero no el resto, por lo que cuando no se podía jugar con la equipación de gala, por ejemplo porque estaban en lavandería, pues se jugaba con una camiseta sin escudo. Esto fue habitual hasta la década de los ochenta, pues a partir de entonces el escudo se fue convirtiendo en un elemento habitual en todas las camisetas.
4. Cuando el portero iba vestido de «portero»
Fútbol Clásico: En el “fútbol clásico” el portero llevaba una equipación claramente diferenciada del resto de compañeros, no sólo por el color de la camiseta, que solía ser negro, sino también por el tejido de ésta (a veces un jersey, por todos los complementos adicionales, como guantes (uso relativamente reciente, a partir de los años setenta), rodilleras, musleras y hasta gorra para evitar el deslumbramiento del sol. En los años ochenta y noventa fue bastante habitual en los porteros el uso de pantalón de chandal.
Fútbol Moderno: El portero sólo se diferencia del resto de compañeros por el color de la camiseta. El resto de complementos se han perdido, salvo los guantes.
Reseña histórica: Hasta 1909 la indumentaria del portero no era diferente a la del resto de jugadores, pero entonces la IFAB consideró la necesidad de diferenciarlo, optando por uniformarlo con una camiseta de otro color, imponiéndose el verde desde 1912. Posteriormente el más frecuente fue el negro y actualmente vale todo con tal de diferenciarse del resto de jugadores.
5. Cuando el aficionado no llevaba camiseta del equipo
Macarti y Manolo el del bombo
Fútbol Clásico: Consecuencia de la no comercialización “salvaje” de las camisetas y otros productos del equipo, el ambiente en las gradas era completamente distinto al actual. De entrada, era bastante inusual ver a aficionados vestidos con la camiseta del equipo, entre otras cosas, porque no era normal que se vendiesen. En ocasiones, había aficionados especialmente carismáticos y extrovertidos, que llevaban la camiseta del equipo, lo que era considerado como una excentricidad propia de los “locos” del fútbol. Esos maravillosos «locos», como Manolo «el del Bombo» o el inolvidable cadista «Macarti».
Fútbol Moderno: Actualmente es bastante normal que cualquier aficionado tenga, al menos, una camiseta del equipo, bien sea oficial, gastándose una pasta, o “pirata”, mucho más baratita y prácticamente igual. En partidos especialmente importantes, resulta bastante normal que el aficionado acude a animar a su equipo con la camiseta del mismo, lo que confiere a las gradas un colorido muy especial que antes no existía.
6. Cuando las calzonas “marcaban paquete”
Fútbol Clásico: Las calzonas eran cortas, a veces, muy cortas, y ajustadas, especialmente durante la década de los ochenta. Las medias quedaban a un tramo de las rodillas, después de la vuelta. Muchos jugadores incluso las llevaban bajadas, dejando al aire las espinilleras. Con todo ello, el jugador mostraba prácticamente la totalidad de sus piernas. Y, a veces, más.
Fútbol Moderno: Las calzonas actuales son enormes, tanto en el largo, por las rodillas e incluso por debajo de éstas, como en el ancho de pernera. En ocasiones parecen faldones. Ahora las calzonas también suelen estar cargadas de publicidad. Y las medias ya no es que lleguen a las rodillas, sino que la sobrepasan claramente y no se suele poner la vuelta. Si a esto se suma la utilización de “calentadores”, los jugadores ocultan prácticamente la totalidad de sus piernas.
7. Cuando había “gorditos” y “canijos”
Fútbol Clásico: Los jugadores era eso, jugadores de fútbol, ¡futbolistas! Y se preparaban y entrenaban para jugar al fútbol. No había nutricionistas ni exhaustivos controles de alimentación, ni nada de eso. Entre los jugadores había todo tipo de constituciones físicas, los había entraditos en carnes, gordito, y los había canijos. Las condiciones físicas tampoco tenían nada que ver a las actuales, produciéndose un significativo agotamiento de los jugadores durante los segundos tiempos.
Fútbol Moderno: Ahora los fútbolistas son, ante todo, atletas. No sólo se entrenan y preparan para jugar al fútbol, sino que trabajan muchas horas de gimnasio. Esto hace que, además de fútbolistas, sean grandes atletas con cuerpos esculturales, de los que les gusta presumir a la más minima ocasión que se les presenta. Otro añadido del futbol moderno es la “moda” de los tatuajes en los jugadores, que en ocasiones cubren completamente brazos y piernas, y de los que, claro, también tienen que hacer ostentación.
8. Cuando había que ir temprano para coger sitio
Fútbol Clásico: Las entradas, salvo en las gradas más caras, como Tribuna o similar, no eran numeradas. Y tampoco había asientos, sino que eran gradas de cemento corrido que, como mucho tenían pintado las limitaciones de cada asiento. No más. Así que cada cual se sentaba como y donde podía. Tampoco había control del número de personas, por lo que había partidos donde el aforo estaba sobradamente sobrepasado. Ni que decir tiene que no había tornos de entrada, sino que se entraba al “apretujón”, para desesperación de los porteros. En estas situaciones estaba claro que el número de colados era de consideración.
Evidentemente el ambiente era claramente mayor que el actual. Este ambiente queda actualmente reducido a las gradas donde se concentran los aficionados más bullangueros de cada club.
Para coger un sitio bueno, “centraíto”, había que ir temprano al campo. Y en partidos especialmente interesante ese “temprano” podía suponer llegar hasta dos horas antes de comenzar el partido. Ni se te ocurriese llegar tarde, porque además del tiempo ya perdido, tenías que perder otro buen rato en encontrar algún hueco, y seguro que esquinado. Este simple hecho hacía que la ambientación comenzase con mucho tiempo de antelación, los aficionados se entretenían como podían, se veía a los jugadores y trío arbitral paseando y comprobando el césped, haciendo los calentamientos previos, etc. En toda esta espera ayudaba mucho que se pudiera introducir en el campo tranquilamente cualquier tipo de sustento alimenticio, ya fuese sólido, líquido (con preferencia a los espirituosos) o “gaseoso”. Recordar que por entonces no había ningún tipo de control ni limitación a la venta y consumo de bebidas alcohólicas.
Fútbol Moderno: Actualmente tanto FIFA como UEFA obligan a que todos los estadios tengan grandes medidas de seguridad, en cuanto al control de la entrada (tornos de entrada), en los registros, en la colocación de los espectadores, en cuanto al aforo, etc. Y tampoco está permitida la venta ni el consumo de bebidas alcohólicas. Ni siquera se permite la entrada a alguien con claros síntomas de embriaguez. Todos los aficionados tienen su localidad reservada, por lo que se ha perdido la costumbre de “irse tempranito para coger un buen sitio”, pues con el sitio asegurado basta llegar un poco antes del pitido inicial, y si se llega un poco más tarde, tampoco pasa nada. Estos mismo estadios, con las mismas gradas, tienen tenían en el “fútbol clásico” una capacidad mucho mayor, en torno al 20% más.
En el “fútbol moderno” todo es mucho más controlado, pero tamién mucho más aburrido. Parece que se ha ganado en seguridad, pero se ha perdido buena parte de la “esencia” del ambiente de las gradas.
9. Cuando la victoria era de dos puntos
Fútbol Clásico: En todas las competiciones ligueras se sumaban dos puntos por victoria y uno por empate.
Fútbol Moderno: La victoria se premia con tres puntos.
Reseña histórica: En la temporada 1995/96 la Liga española se suma a la idea de conceder tres puntos por victoria, en lugar de los dos que había hasta entonces. Esta medida se inició en la Liga inglesa en 1981, siendo adptada por FIFA y UEFA en 1994.
10. Cuando se marcaban goles en “plancha”
Fútbol Clásico: Un recurso técnico propio del delantero centro clásico, casi siempre con grandes dotes cabeceadoras, era lanzarse en “plancha” para rematar de cabeza. Era una acción en la que el balón le llegaba a media altura, entre rodilla y cintura, y el delantero, que venía corriendo desde atrás, se lanzaba en horizontal al suelo para impactar con el balón.
Fútbol Moderno: Es muy raro ver un cabezazo en “plancha”, de hecho, especialmente en España, cada vez hay menos juego aéreo en el área debido a la práctica desaparición de los extremos clásicos y la falta de centros.
Reseña histórica: Uno de los goles en plancha más relevantes de la historia es el conseguido en 1960 por el brasileño Evaristo a favor del FC Barcelona frente al Real Madrid, en partido de octavos de final de la Copa de Europa.
https://elfutbolymasalla.com/wp-content/uploads/2016/04/Macarti-y-Manolo-el-del-bombo.jpg462350Manuel Granado Palmahttps://elfutbolymasalla.com/wp-content/uploads/2021/10/logo-efyma.pngManuel Granado Palma2016-04-07 19:05:132021-10-12 21:34:16Cosas del Fútbol que se han perdido. Capítulo I
La figura del árbitro no siempre ha existido en el fútbol. Se presuponía la honradez y caballerosidad de los jugadores para ponerse de acuerdo entre ellos. Un paso posterior fue la introducción de los umpires (ampáyeres), que eran una especie de “delegados”, uno por cada equipo, colocados detrás de cada portería, y que decidían juntos en caso de dudas. La primera referencia al referee (árbitro) data de 1871, en la Reglamentación de la FA Cup (primera competición de fútbol de la historia), pero como figura consultiva y fuera del terreno de juego. Sólo desde 1891, coincidiendo con la reglamentación del penalti, el árbitro pasa a tener toda la autoridad decisoria y los umpires se convierten en sus jueces de línea.
Cuando no existía el árbitro
Cuando a mediados del siglo XIX se comienza a jugar al football en los patios y campus de los colleges ingleses, todavía no se habían consensuado unas reglas generales del juego, por lo que las reglas se acordaban entre los equipos contendientes. Incluso se acordaba el número de jugadores. Y para la determinación y cumplimiento de esas reglas no hacía falta ni árbitro, ni nada que se le pareciera, pues se consideraba que el football era un juego de caballeros y se confiaba en la palabra de los jugadores para hacer respetar las mínimas reglas acordadas.
Podría haber falta de acuerdo por interpretaciones diferentes de las reglas o de la acción en sí, pero estaba absolutamente descartado que un jugador similara o solicitase una ventaja de las reglas a sabiendas de su injusticia.
Los Capitanes
Un paso posterior fue la figura del capitán de cada equipo, que pasaba a ser el “delegado” del mismo para asegurar el respeto por las reglas previamente acordadas. Este capitán no tiene nada que ver con la figura actual, pues entonces el capitán era prácticamente el jefe del equipo a todos los efectos, ejerciendo de presidente, entrenador, gestor y organizador. A partir de este momento, cuando no había acuerdo en la aplicación de las reglas, los dos capitanes se debían poner de acuerdo.
The Umpires (Ampáyeres) (1850)
Desde mediados del siglo XIX se considera la posibilidad de que los capitanes puedan ejercer su representación del equipo desde fuera del terreno de juego, ejerciendo como “delegado” del mismo. Se termina creando una nueva figura, cuya denominación inglesa es the umpire, aplicando una ya existente en el cricket, y que aún hoy perdura como tal en algunos deportes, como el beisbol, y que se castellanizó como “ampayer”, sobre todo en zonas de Sudamérica, especialmente en México. La palabra umpire procede de la palabra «nomper», del francés antiguo, y que viene a significar «hombre en solitario».
Así pues, los umpires no eran figuras neutrales, sino que cada equipo llevaba el suyo, soliendo ser personas de alta representación y jerarquía y, sobre todo, con reconocido conocimiento de las reglas y de alta moral. Si ya se reconoce la plena deportividad y caballerosidad de los jugadores, mucho más la de los umpires. Hay referencias al umpire en partidos de los colleges de Eton y Winchester.
Cada umpire se colocaba detrás de la portería contraria al equipo al que representaba y su principal función era ir constatando que se había producido gol, cosa no simpre clara, pues era frecuente que en las líneas de gol se agolparan muchos jugadores pateando simultáneamente el balón, unos para meterlo y otros para sacarlo, y se debía hacer difícil saber con exactitud si había entrado o no. Al mismo tiempo hacía de marcador, pues se encargaban de ir contabilizando los goles, que, por lo que se ve, debían ser muchos. Es curioso, pero podría ser una figura parecida a lo que actualmente son los jueces de gol.
En cualquier caso, las decisiones sobre la aplicación de las reglas acordadas se seguían tomando entre los jugadores y sólo en caso de no llegarse a un acuerdo, algo excepcional, se solicitaba la presencia de los umpires en el centro del campo para que intentasen llegar a un consenso sobre la acción conflictiva.
Footbal Association (1863)
Desde la redacción de las Reglas del Juego por la Football Association en la Freeson Tavern de Londres en 1863, las reglas dejan de ser improvisadas y consensuadas por los equipos contendientes, pues las reglas de la FA comienzan a ser aplicadas de forma genérica a todos los partidos. Sin embargo, todavía no se hace ninguna referencia al árbitro.
El Referee de Cheltenham (1867)
Hay referencias de que en el college de Cheltenham ya se considera la participación de un agente mediador, “referee”, para resolver aquellas cuestiones reglamentarias que resultasen dudosas entre los contendientes. Podría considerarse como la primera mención a la figura del árbitro en fútbol, pero Cheltenham era seguidor de las reglas del college de Rugby, por lo que habría que considerarlo, en todo caso, como un precedente del árbitro en rugby, no en fútbol.
The referee (el árbitro) (1871)
La primera referencia a la figura del árbitro como tal en fútbol surge durante la organización en Inglaterra de la Football Association Challenge Cup (FA Cup), la primera competición de fútbol de la historia, que se celebró entre noviembre de 1871 y marzo de 1872. Una de las novedades es respecto a los umpires, pues se determina que dejen de ser designados por cada equipo, y que sean agentes absolutamente neutrales designados por la Organización.
Pero la principal novedad es la introducción de la figura del referee, situado también fuera del terreno de juego, pero como agente consultor o mediador para resolver aquellas situaciones en las que los umpires no lleguen a un acuerdo. Destacar que esta situación sólo se determinaba para los partidos de Semifinales y Final.
Concretamente el reglamento de este Campeonato (FA Cup), no confundir con las Reglas del Juego de la FA, en su punto nº 15 decía:
“La Comisión designará dos Umpires y un Referee para actuar en los partidos de semifinales y final.Ni los Umpires ni el Referee deberán ser miembros de los clubes participantes y la decisión de losUmpires será final salvo en el caso de que no concuerden, entonces una petición será hecha al Referee, cuya decisión será final”.
Con todo ello, el orden de aplicación de las Reglas del Juego era el siguiente:
Acuerdo entre los Jugadores implicados en la acción.
Acuerdo entre los Capitanes.
Acuerdo entre Umpires.
Decisión del Referee.
El primer Partido Internacional (1872)
El sábado 30 de noviembre de 1872, día de St. Andrews (patrón de Escocia), se disputa en Glasgow el primer partido internacional de fútbol de la historia. Se enfrentan un combinado de Inglaterra y uno de Escocia., que acabarán empatando a cero. Anteriormente ya se habían enfrentado, pero la selección escocesa siempre había estado formada por jugadores afincados en Inglaterra.
El partido se disputa en un campo de críquet, algo frecuente en la época por disponer de buenas condiciones e infraestructuras, el West of Scotland Cricket Club. Se mantiene a los dos umpires y al referee como juez neutral consultor. Pero a diferencia de lo establecido en la FA Challenge Cup, aquí si se permite que sea cada equipo quien lleve su umpire. De hecho, para este histórico partido el umpire del combinado escocés fue Henry Norris Smith, presidente del Queen’s Park Club de Glasgow (equipo que aportaba todos los jugadores escoceses); y el del inglés fue Charles William Alcock, secretario de la Football Association inglesa.
Lo curioso es que el referee, que en principio debería ser neutral, es William Keay, tesorero del Queen’s Park Club. Sin embargo, hay tanto respeto a la caballerosidad y neutralidad de sus decisiones, que no supone ningún inconveniente, pues lo más importante es que sea un buen conocedor de las Reglas del Juego. De hecho, sólo debe intervenir en una ocasión: hay dudas entre los umpires de si en un disparo de Escocia el balón ha pasado por encima o por debajo de la cinta que hace de larguero. Es necesario recurrir a la decisión final del referee, que determina que el balón ha pasado por encima, por lo que no se concede el gol.
El Penalti (1891)
Desde la creación de la International Football Association Board (1886), este organismo toma toda la potestad respecto a las Reglas del Juego. En 1891 se regula el penalty, aunque para señalarse debía ser expresamente solicitado por el jugador implicado, algo que no era muy bien considerado, por entenderse como una falta de caballerosidad y respeto hacia el rival.
Había una opinión cada vez más generalizada de que no se podía dejar tan trascendental decisión a la voluntad de los jugadores, ni crearles esa carga de conciencia, o sufrir reacciones externas por haber solicitado lo que, en principio, le correspondía en justicia.
El referee como juez principal (1891)
El fútbol se va expandiendo, no sólo por toda Gran Bretaña, sino por buena parte de Europa y Sudamérica. Se va haciendo más competitivo, van creciendo las rivalidades y el afán y orgullo por la victoria, aumenta considerablemente el número de aficionados, los campos comienzan a llenarse y a quedarse pequeños para albergarlos y se inician afinidades profundas con los equipos. Todo esto hace que cada vez resulte más complicado que desde dentro del terreno de juego se llegue a acuerdos sobre la aplicación de las Reglas del Juego en las diferentes acciones que se van produciendo.
Tampoco es fácil que los propios umpires lleguen a decisiones consensuadas, por lo que cada vez resulta más normal que se deba recurrir a la decisión final del referee. Ya en 1889 se acuerdó que el referee tuviese autoridad para dictaminar faltas sin necesidad de que fuesen solicitada (a favor o en contra) por los jugadores.
Precisamente la regulación del penalti viene estrechamente asociada a la decisión de la IFAB, que en sesión de 2 de junio de 1891 (a propuesta de la Asociación Irlandesa) introduce en las Reglas del Juego la figura del referee, con la iniciativa y plena autoridad decisoria sobre la aplicación de las Reglas del Juego, así como del cronometraje del partido.
La regla nº 12 pasa a ser redactada con el siguiente texto:
“Por mutuo acuerdo de los clubes en competencia, un Referee deberá ser designado y su tarea será decidir en todos los casos de disputa entre Umpires. Él también guardará un informe del juego y controlará el tiempo del mismo. En caso de comportamiento no caballeresco por parte de los contendientes deberá, en presencia de los Umpires, amonestar a los infractores. En caso de conducta violenta el Referee tendrá el poder para expulsarlos, trasmitiendo el nombre o nombres al Comité de la Asociación bajo cuyo control el partido sea jugado, y en quién sólo será investido el derecho de aceptar una disculpa.
El Referee tendrá el poder para finalizar el juegosiempre que lo considere necesario, por falta de luz, interferencia de espectadores, o cualquier otrarazón que estime conveniente, y reportará los sucesos a la Asociación bajo cuya jurisdicción el partido se haya jugado, la que tendrá pleno poder para tratar el asunto.
El Referee tendrá poder para conceder un tiro libre sin necesidad de petición en cualquier caso donde considere la conducta de un jugador peligrosa, o presumiblemente peligrosa.”
Los Umpires se convierten en Linesmen (Jueces de Líneas) (1891)
Pero ahora que el referee tiene plena autoridad, ¿qué pasa con los umpires? La decisión de la IFAB es que los umpires pasen a ser ayudantes del referee, asistiéndole en la señalización de los fuera de banda y los fuera de juego (linesmen). Consecuencia de ello es el cambio de su ubicación, pasando de estar en las líneas de fondo a las líneas laterales limitadoras del terreno de juego.
La regla nº 12 se completa con el siguiente texto:
“Dos Linesmem (Jueces de Línea) serándesignados, cuyas obligaciones (sujetas a las decisiones del Referee) serán decidir cuando el balón esté fuera de juego, y a quién corresponderá el tiro de esquina, saque de meta o saque lateral.Cualquier indebida interferencia por parte de un Lineman deberá ser informada por el Referee a la Asociación Nacional a la que pertenezca, la que tendrá pleno poder para tratar el asunto».
De ello se desprende que los umpires se convierten en los actuales jueces de línea (desde 1996 llamados “árbitros asistentes”). Se procurará que tanto referee como linesman sean neutrales y elegidos entre reconocidas figuras por su trayectoria y honorabilidad. En principio era designado por la Organización del partido o Campeonato, pero también era normal que fueses acordados por los equipos. En la mayoría de las ocasiones eran antiguos jugadores.
La otra gran consecuencia de esta decisión es que el referee pasa de estar fuera del terreno de juego, cómodamente sentado (a modo del actual juez de silla del tenis), a situarse dentro del terreno de juego, junto a los jugadores. El referee va enchaquetado y apenas se mueve del centro del campo, haciéndose valer a través de señales de brazos y, sobre todo, su silbato, del que hay referencias de su uso desde 1878, si bien es de suponer que debían ser usados por los umpires para indicar los goles.
En 1896 la IFAB edita la primera Carta de Árbitros con reglas y recomendaciones; y en 1903 quedan delimitadas las funciones de árbitro y jueces de línea.
El «trencilla»
En España, desde los primeros años del fútbol, casi toda la terminología relativa al fútbol era con las palabras anglófonas originales, aunque con una pronunciación muy españolizada, así al árbitro se le llamaba “réferi”. Con la ley de 1941 para castellanizar los nombres de clubes y la lexicología deportiva, se castellanizaron todas los anglicismos, generalmente con traducciones literales, aunque permanecieron algunas como “córner”. Así, el “réferi” pasó a ser “árbitro”, aunque popularmente se le conocía como el “trencilla”, expresión que aún hoy se sigue utilizando.
La explicación de esta expresión es que los árbitros utilizaban una chaquetilla negra cuyos bordes y solapa llevaban una especie de cordón blanco bordado (pasamanería). A ese cordón se le llamaba “trencilla”. Utilizando el recurso lingüístico del sinécdoque, se popularizo el nombre de una parte (trencilla) para designar al todo (árbitro).
El cuarto árbitro (1991)
Un siglo después de la institucionalización del árbitro como se reconoce actualmente, la FIFA incorpora al Trío Arbitral un cuarto
elemento, el “cuarto árbitro”, situado fuera del terreno de juego en una zona habilitada entre los banquillos. Sus funciones principales son avisar de los cambios de jugadores y comprobar la corrección de ellas a todos los efectos, así como el con
trol de los entrenadores y uso de las áreas técnicas. También es quien debe sustituir al árbitro o jueces de línea durante el partido, si así fuese necesario.
Asistentes de gol (2008)
En 2008 la FIFA introduce para los partidos de competiciones internacionales la figura del “asistente de gol”, dos, una en cada línea de fondo. Se trata de un asistente para consulta del árbitro en acciones muy cercanas a la línea de fondo, siendo especialmente destacable en situaciones de dudas respecto a si el balón ha traspasado o no la liínea de gol.
Más Información en:
BERNÁRDEZ, J. (1998): “El deporte correctamente hablado”. Universidad de Oviedo.
CASTELLANO, J. (Editor) (2008): “Fútbol e Innovación”. Wanceulen, Editorial Deportiva.
GALEANO, E. (1995): El fútbol a sol y sombra. Ed. Siglo XXI.
GONZÁLEZ, L.M. (2013): Las mejores anécdotas de árbitros. Ed. La Esfera de los Libros.
https://elfutbolymasalla.com/wp-content/uploads/2016/03/jugada-regate.jpg401308Manuel Granado Palmahttps://elfutbolymasalla.com/wp-content/uploads/2021/10/logo-efyma.pngManuel Granado Palma2016-03-22 22:24:422016-03-22 22:27:22Cuando no había árbitro
Desde mediados del S. XIX, el juego del foot-ball (Fútbol), que había evolucionado durante siglos, se fue extendiendo por las universidades y colegios británicos, haciéndose necesaria la redacción de unas Reglas del Fútbol para la disputa de partidos. Hubo muchos intentos, pero no terminaron de generalizarse, hasta 1863. Desde entonces a la actualidad, las Reglas del Fútbol han ido sufriendo algunos cambios e incorporando figuras, pero siempre manteniendo la esencia original del juego.
Antecedentes del Fútbol
En el artículo sobre los Antecedentes del Fútbol nos quedamos en el desarrollo del Calcio Florentino a mediados del S. XVI. Pues bien, los códigos del Calcio Fiorentino, reglado y mucho más organizado que el Fútbol de Carnaval británico (Shrovetide Football), terminan alcanzando a los colegios y universidades inglesas, que lo adaptan a sus particulares juegos de pelota, aplicando diferentes códigos y reglas de funcionamiento.
Es en estos momentos, y en tierras británicas, donde el juego alcanza su mayor dimensión popular. Pero en cada universidad, colegio o lugar, el juego se rige de una manera diferente, por lo que prácticamente resulta imposible poder competir entre ellos.
Las Reglas de Rugby (1845) y Eton (1847)
Las primeras iniciativas para formalizar y redactar unas reglas del juego parten del Colegio de Rugby, con gran tradición desde 1823 (William Webb Ellis). En 1845, tres estudiantes de Rugby, William Delafield Arnold, W. W. Shirley y Frederick Hutchins redactan las que serán las primeras reglas escritas de cualquier tipo de Fútbol, el Football-Rugby, pues su juego era mucho más parecido al actual Rugby.
En contraposición a Rugby, se va desarrollando otra variante del juego comandada por el Colegio de Eton, en la que la dinámica del juego es mucho menos agresiva.
Partiendo de estas dos versiones del juego, cada colegio se va adhiriendo a unas u otras. Algunos de los colegios seguidores de Rugby son Marlborough, Rossall y Cheltenham; mientras que la variante de Eton es seguida por colegios como Harrow, Westminster o Charterhouse. Para que el juego pudiera prosperar era necesaria la unificación de las reglas para que todos jugaran bajo el mismo reglamento. Los partidos se solían jugar en las explanadas del Campus o en los patios de los Colegios, utilizando las arcadas como «porterías», de ahí que posteriormente a las porterías se le llamase «arco» y a los porteros, «arqueros», expresiones que se siguen utilizando en muchos países de Sudamérica.
Las Reglas de Cambridge (1848)
Reglas de Cambridge (1848)
En 1848, dos estudiantes de la Universidad de Cambridge, Henry Winton y John C. Thring, organizan una reunión en el Trinity College de su universidad con miembros de otros colegios y universidades británicas (Eton, Harrow, Winchester, Shrewsbury y Rugby) para concretar unas reglas generales del juego. Hay referencias de un intento anterior en 1846. De estas reuniones surge la que se considera primera redacción unificada de las Reglas del Fútbol, las Reglas de Cambridge.
Las reglas son clavadas en los árboles de parques y campus para que todos tengan claro cuáles son los condicionates que rigen la práctica del Fútbol. El primer partido de Fútbol como tal, con las Reglas de Cambridge, se juega en Parker’s Piece, un parque de la propia ciudad de Cambridge, siendo considerado el primer partido reglado de Fútbol de la historia. Y así queda registrado en una placa situada en el mismo parque:
«Aquí, en Parker’s Piece, en los 1800s, los estudiantes establecieron un conjunto de simples reglas de Fútbol enfatizando habilidad sobre fuerza, que prohibieron atrapar la pelota y zancadillear. Estas reglas de Cambridge fueron la influencia definitoria de las reglas de 1863 de la Fútbol Association».
Para algunos, las Reglas de Cambridge, de las que no existen documentos originales, podrían considerarse las primeras y originales reglas del Fútbol como tal, pero la realidad es que, aunque fueron admitidas y utilizadas en muchos partidos y competiciones universitarias, no tuvieron la oficialidad ni el carácter global para ser consideradas auténticas reglas del Fútbol.
Las Reglas de Cambridge sentaron las bases normativas, pero aún así tuvieron muchas interpretaciones, de forma que cada colegio las aplicaba a su manera. Entre estas particulares interpretaciones destacan las de Shrewsbury y las de Sheffield.
Fútbol y Rugby
Las principales discrepancias vienen del Colegio de Rugby, que no admite algunas limitaciones para coger el balón con las manos (lo hacían desde 1823 por iniciativa de William Webb Ellis) o cierto control de acciones consideradas violentas.
Desde entonces Fútbol y Rugby toman caminos distintos, tomando Rugby el camino emprendido en 1823 y que determinaría finalemente el Rugby como variante del Fútbol, aunque siendo rigurosos con la historia, sería al revés: el Rugby siguó la línea evolutiva natural y el Fútbol se creó como una variante donde se limitaba el uso de las manos y el juego agresivo de contacto. Hay un viejo dicho británico que dice: “el Rugby es un deporte villano jugado por caballeros; y el Fútbol es un deporte de caballeros jugado por villanos”.
Las Reglas de Shrewsbury (1856)
Las Reglas de Shrewsbury son el documento reglado más antiguo del Fútbol que existe. Se conserva una copia en la biblioteca de Shrewsbury School, uno de los colegios participantes en la redacción de las Reglas de Cambridge, y que fue de los más insistentes en la eliminación del uso de las manos. No son unas reglas nuevas como tal, sino que son las Reglas de Cambridge con algunas aclaraciones y matizaciones puntuales realizadas desde Shrewsbury.
En ellas se constata las limitaciones del uso de las manos, se regulan los saques de banda y puerta, el reinicio del juego tras cada gol, la sanción de faltas con golpes de castigo y aclaraciones sobre el fuera de juego.
Las Reglas de Sheffield (1857)
Youdan Cup
Sheffield no participó directamente de los acuerdos de Cambridge, pero también era uno de los principales precursores del Fútbol. En la ciudad de Sheffield había un popular club de Cricket, cuyos miembros ocasionalmente también se entretenían dando patadas a un balón, aunque sin ningún rigor normativo. El 24 de octubre de 1857, dos de sus miembros, Nathaniel Creswick y William Prest (estudiantes del Harrow School de Londres), se aventuran a fundar un club de Fútbol, el Sheffield Football Club, que actualmente sigue activo, siendo considerado por FIFA como el club de Fútbol más antiguo del mundo. Es un club amateur que juega en la Octava categoría de Inglaterra. Fruto de su creación se juega la Tommy Youdan Cup, considerada la primera competición de Fútbol de la historia. En los años siguientes comienzan a fundarse clubes de Fútbol por todo el país.
Sheffield Football Club (1857)
Las reglas de Sheffield introducían aspectos como la utilización del larguero en las porterías, el saque de esquina, el saque de falta, o los sistemas de desempate de los partidos a través de la disputa de una prórroga resuelta con lo que hoy conocemos como “Gol de Oro”, ya en desuso..
El Football Association (1863)
Con la popularización del Fútbol en los colegios y universidades y la proliferación de clubes de Fútbol, se hace necesaria la concreción de unas mismas reglas del juego para todos; y así poder organizar partidos entre ellos e ir universalizando el juego. Finalmente, tras varios intentos fallidos, la reunión se concreta el lunes 26 de octubre de 1863 en la Freemason’s Tavernde Londres, donde se citan representantes de once clubes ingleses: Barnes, Charterhouse, Perceval House, Keningston School, War Office, Crystal Palace, Blackheath Propietary School, The Crusaders, Forest, No Name’s Club y Blackheath. Como curiosidad, el War Office sigue existiendo en la actualidad con el nombre de Civil Service FC.
La FA no tenía una intención globalizadora del fútbol, más bien todo lo contrario. Era una sociedad muy restringida, egocéntrica y limitada para aquellos clubes y sociedades de la alta burguesía inglesa, equipos de universidades, equipos de militares de alta graduación, de jóvenes empresarios, banqueros, etc. El futbol era un deporte elitista, un «juego de caballeros». Evidentemente, la cosa se le fue de las manos…
La primera decisión fue constituirse en sociedad, fundando la Football Association, nombre que, por analogía, también se aplicó al nombre genérico del juego. El nombre oficial del juego (deporte) no es «football» (fútbol) sino «football association». De hecho, una derivación de la palabra, “Association”, es “Soccer”, que se sigue usando en EE.UU. para el Fútbol.
La segunda decisión es utilizar las Reglas de Cambridge como base para la elaboración de unas reglas universales para el juego del Football Association, del Fútbol. Y la tercera hacerlo con el propósito de formalizarlo desde los principios de la “igualdad, la seguridad y la diversión”.
Se celebran seis reuniones hasta que el martes 8 de diciembre de 1863, ya con diez miembros, pues Blackheath se había retirado por no haberse permitido las patadas por debajo de las rodillas, se llega a un acuerdo definitivo de 14 reglas. El Blackheath Club constituiría en 1871, junto a otros 22 clubes, la Rugby Football Union.
La redacción de las reglas del Football Association corre a cargo de Ebenezer Cobb Morley, representante del Barnes Club. Ese mismo día se ponen en práctica las nuevas reglas del juego con un partido entre el Barnes Club y el Richmond Club.
Pese a todo, siguen habiendo algunas divergencias, sobre todo con Sheffield.
En algunos estudios se habla de “13 reglas”, pero la propia FIFA reconoce en su web que fueron 14. Realmente es lo mismo, pues se trata de la división de una regla en dos.
Las 14 Reglas del Football Association de 1863 sentaron la base normativa del juego y desde entonces se han mantenido como la esencia reguladora del mismo, aunque, evidentemente, se han tenido que ir acomodando y adaptando a las exigencias de los tiempos.
Las 14 Reglas del Football Association
De forma resumida, estas primeras 14 reglas, que mantienen muchas similitudes con su “hermano” el Rugby, son las siguientes:
Medidas: el terreno de juego debe tener un máximo de 200 yardas (183 m.) de largo y 100 de ancho (91,5 m.); y las porterías: ocho yardas (7,3 m.) entre dos postes verticales (no hay larguero).
Comentario: actualmente los campos son mucho más pequeño (máximo de 120×90 m.), pero la distancia entre los postes se mantiene exactamente igual, con la salvedad de la colocación del larguero a una altura de 2,44 mm.
Sorteo inicial: el ganador elige campo y el perdedor saca con una chut adelante.
Comentario: ha seguido exactamente igual como Regla 8, hasta la temporada 2019/20 en la que el ganador del sorteo puede elegir campo o saque.
Saque tras gol: tras conseguirse un gol, se cambia de campo y saca de centro el equipo que lo haya recibido.
Comentario: actualmente no hay cambio de campo tras un gol.
Gol: se consigue al pasar el balón entre los postes (o su espacio), pero sin ser lanzado.
Comentario: parece que el gol se conseguía conduciendo el balón entre palos (como el ensayo en Rugby), por lo que no hacía falta larguero. Los goles se contabilizaban haciendo una marca en los postes, de ahí la expresión «marcar un gol», que se ha mantenido con el paso del tiempo.
Saque de banda: cuando el balón sale de banda, saca el primero que coja el balón y lo lanza al campo en línea recta, no estando en juego hasta que toque el suelo.
Comentario: seguía habiendo mucha similitud con el Rugby, posteriormente evolucionaría al Fútbol actual, donde saca el equipo contrario al que lanzó el balón fuera y hacía donde quiera.
Fuera de juego: incurre aquel jugador atacante que esté más adelantado que el balón en el momento de producirse un pase avanzado.
Comentario: sigue recordando al Rugby, con ataques escalonados.
Saque de fondo: cuando el balón sale por detrás de las porterías, se pondrá en juego con un “golpe franco” por el equipo que lo lanzó. En caso del atacante será a una distancia de 15 yardas (13,7 m.) de la portería en línea recta del lugar por donde salió.
Comentario: no existían los córneres.
Fair-Catch: si un jugador coge el balón con las manos directamente en el aire y lo reclama clavando el talón en tierra, tiene derecho a un tiro libre.
Comentario: había situaciones en las que aún se permitía tocar o coger el balón con las las manos. Otro recuerdo al Rugby.
Manos: no se puede avanzar con el balón en las manos.
Irregularidades: no se puede zancadillear, dar patadas o sujetar a un contrario.
Manos II: no se puede lanzar ni pasar el balón con las manos.
Manos III: no se puede coger el balón del suelo con las manos.
Manos IV: tras botar el balón en el suelo se puede coger con las manos y pasarlo.
Comentario: evolucionaría hasta la supresión total de las manos, salvo las “involuntarias” y el portero dentro del área.
Borceguíes: no se permiten clavos salientes, placas de hierro o gutaperchas (refuerzo de goma) en las suelas o tacones.
Comentario: las botas actuales no tienen nada que ver con las antiguos borceguís.
El Larguero (1866)
En 1866 se coloca una cinta entre postes a una altura de 2,44 m., de forma que el gol se consigue al introducir el balón entre los postes y cinta. Es uno de los cambios más importantes en las Reglas del Juego, pues se puede conseguir “Gol” de un disparo, no sieno necesario pasar entre los palos con el balón controlado (a modo de ensayo de Rugby) como era hasta entonces.
Cambio de la regla del Fuera de Juego (1866)
En las 14 Reglas, un atacante incurría en posición irregular de fuera de juego si estaba por delante del balón en un pase adelantado. Esto provocaba que se jugará con hasta ocho delanteros alineados en diagonal, y el avance sólo era posible con la internada individual con regates y carreras o con avances en líneas con pase atrás, exactamente como es en el Rugby para la consecución del “ensayo”.
En 1866 se cambia y un jugador atacante deja de estar en posición irregular en un pase adelantado si hay, al menos, tres defensores por delante de él (posteriormente, en 1925, pasarían a ser dos jugadores defensores por delante). Este cambio de la regla del Fuera de Juego resulta, posiblemente, la mayor “revolución” del juego, ya que propicia el juego de pases y el sistema táctico pasa a ser de 2 – 3 – 5 (sistema clásico o piramidal).
En los siguientes años se fueron puliendo las 14 Reglas, con matices, clarificaciones y añadiendo nuevas figuras.
En 1869 se introduce el Saque de Puerta.
En 1870 la FA regula que el número de jugadores por equipo debe ser reglamentariamente de once. Posiblemente se establece este número por ser el reglamentario en el Cricket, el juego de equipo más popular en Inglaterra en esa época. Hasta entonces el número de jugadores por equipo se acordaba entre los equipos contendientes.
En 1870 también se habla por primera vez en los textos reglamentarios de la figura del Portero, aunque existía como tal desde el principio.
En 1872 se habla por primera vez de la figura del Árbitro, pero fuera del terreno de juego.
En 1873 se habla por primera vez del Córner.
En 1875 se introduce el larguero, en sustitución de la cinta, a la misma altura de 2,44 m.
En 1882 se introduce el Saque de Banda con las dos manos.
La Footbal Association Challenge Cup FA Cup (1871)
En 1870, la Football Association ya cuenta con 39 clubes; y en 1871 organiza un Campeonato con eliminaciones directas, la “Footbal Association Challenge Cup” (FA Cup), cuya primera final, jugada en el Kennington Oval de Londres es ganada por el Wanderesr al Royal Engineers. En sus primeros años, la competición no tenía demasiado seguimiento ni interés, pues el verdadero interés estaba en los «desafíos» entre clubes en partidos amistosos, peroc argadas de pasión e intensidad.
La FA Cup es la competición más antigua de Fútbol. Pero lo más importante es que las normas comienzan a extenderse y se crean tres asociaciones alternativas al Football Association, la Esocesa, la Galesa y la Irlandesa.
Inicios del profesionalismo
Desde 1978 se comienza a notar que hay equipos del norte, equipos de trabajadores, que pagan a algunos jugadores por sus servicios. Destacan los casos de James Love y Fergus Suter, dos escoceses que habían llegado a Darwen y de los que la FA tenía sospechas de que estaban cobrando. Las normas al respecto estbalcía explicitamente la prohibición de jugar por jugar al fútbol. Las sospechas se convirtieron en evidencia con el paso de Suter al Blackburn Rovers en 1880. Los clubes elitistas ven amenazada su hegemonía; y en 1883, el Blackbur Olympic se convierte en el primer equipo de trabajadores en ganar la FA Cup. El fútbol se populariza y extiende por toda Inglaterra y por todo el mundo. En 1985 la FA autoriza el cobro de jugadores por prestar sus servicios a un equipo. Es el primer paso del profesionalismo.
Primer partido internacional (1872)
En marzo de 1871 ya se había celebrado un partido internacional de Rugby en Edimburgo entre una selección de Escocia y una de Inglaterra; y un año después, en noviembre de 1872, tras muchos debates y discusiones para su organización se termina disputando el que es reconocido por FIFA como el primer partido internacional de Fútbol, enfrentando también a Escocia e Inglaterra.
Antes de este partido ya se habían producido algunos encuentros entre equipo o selecciones inglesas y escocesas, pero sólo de jugadores que jugaban en clubes ingleses. Especial mención tuvo uno jugado en el Kennington Oval de Londres el 5 de marzo de 1870 entre jugadores ingleses y escoceses afincados en Inglaterra.
Las mayores dificultades volvían a radicar en la utilización de las mismas reglas del juego, ya que en Escocia no se termina de aceptar las 14 Reglas del Football Association. Finalmente se consigue organizar el partido internacional el 30 de noviembre de 1872 en Glasgow, en un campo de Cricket, el Hamilton Crescent, finalizando con empate a cero. Todos los jugadores escoceses pertenecían al Queen’s Park Club de Glasgow.
Unificación entre Football Association y Reglas de Shefflied (1878)
En el siglo XIX Inglaterra tenía muchas colonias, así como una extensa red industrial, siderometalúrgica, y mnaval que alcanzaba prácticamente todos los rincones del mundo. Esto hizo que los trabajadores, empresarios y ejecutivos ingleses, muchos de ellos estudiantes pioneros del Fútbol, fueran extendiendo el juego especialmente por Centroeuropa (Bélgica, Francia o Dinamarca) y América (Argentina, Uruguay o Perú). Muchos de estos clubes de Fútbol se constituyen primero clomo de Cricket o Tennis, como el Lima Cricket & Football Club peruano, fundado en 1859 y que aún existe.
Con todo ello, y porque todavía muchos clubes británicos siguen jugando con las Reglas de Sheffield sin reconocer la autoridad del Football Association, se hace imprescindible una nueva reunión global para volver a consensuar las Reglas del Juego. En 1878 se llega a un acuerdo para que todos los clubes se intengren a la Football Association, abandonándose definitivamente las Reglas de Sheffield (el “Neandertal” de la rama histórica del Fútbol)
La British Home Championship (1883-1984)
En 1883 comienza a disputarse la British Home Championship, un campeonato internacional entre las cuatro asociaciones británicas de fútbol, estando vigente hasta 1984. Aunque había bastante uniformidad en las Reglas del Juego, cada asociación las aplicaba con ligreros matices, de tal manera, que en los partidos se imponía las interpretaciones de la selección que jugaba como local.
La International Football Association Board, IFAB (1886)
Desde 1882 las cuatro asociaciones británicas de Fútbol, la inglesa (Football Association), la escocesa, la irlandesa y la galesa, mantienen reuniones con el fin de establecer una unificación absoluta de las reglas y la creación de un organismo común que las regule. Estas reuniones concluyen en Londres el 2 de junio de 1886, dando como resultado la creación de la International Football Association Board, estableciéndose como el único organismo legitimado para regular, cambiar y ejecutar las reglas del Fútbol, no sólo para el Reino Unido, sino para todo el mundo, cosa que se sigue manteniendo en la actualidad, aunque con la incorporación de la FIFA como quinto miembro.
Una de sus primeros debates fue la defición del calzado de losjugadores, los borceguís, para evitar cualquier elemento de peligrosidad, aunque se acepta el uso de tacos en las suelas.
El primer Campeonato Nacional de Liga, The Football League (1888)
Por iniciativa del empresario William McGregor, asociado al Aston Villa y Charlie Fossey, director del Aston Villa, se organiza en Inglaterra el primer campeonato regular de Fútbol, llamada Football League, participando doce clubes en su primera edición de 1888. Este campeonato es el precedente de la actual Premier League.
La figura del Árbitro (1891)
En 1872 se habla por primera vez de la figura del Árbitro, aunque fuera del terreno de juego; y dentro desde 1881. El silbato se introduce en 1878. Pero el árbitro es un agente consultor, pues las dudas reglamentarias se discutían en primera instancia entre los capitanes de cada equipo y en una época posterior por el delegado arbitral de cada equipo (Umpires). Debido al incremento de la intensidad en el juego y a la mayor competitividad, las discusiones eran cada vez mayores y se perdía demasiado tiempo. Para solucionarlo, en 1891, la IFAB decide que el árbitro tuviera la capacidad primera de decisión y que los delegados arbitrales de cada equipo se convirtieran en asistentes del árbitro, pasando de agentes dependientes de los clubes a dependientes del árbitro, resultando así la figura de los “Jueces de Líneas” (actualmente llamados “Árbitros Asistentes”).
El Penalty (1891)
En ese mismo año de 1891, la IFAB, a propuesta de la Federación Irlandesa, decide diferenciar entre tiro libre directo e indirecto, resultando el Penalty como sanción ante una infracción de tiro libre directo cometida en clara situación de gol. Para ello se hizo necesaria la señalización de la “Línea de penalty”, dentro de la cual la falta se castigaba con penalty. Esta línea se marcaba a doce yardas (once metros) paralela a la línea de fondo. El lanzamiento de penalty se podía ejecutar desde cualquier punto de esta línea y el portero podía adelantar su posición hasta en 5,5 metros marcado con una línea semicircular.
Curiosamente para poder sancionar una acción con Penalty debería ser por solicitud expresa del atacante, pues el árbitro no la podía sancionar de motu propio. Esto tiene sentido porque no era aceptado plenamente, pues algunos consideraban que era un acción antideportiva, razón por la cual en algunas ocasiones se lanzaban fuera o el portero se quedaba quieto.
En 1902 se hizo una revisión de la norma, y se estableció el lanzamiento de Penalty desde un punto fijo, igualmente a once metros, en perpendicular al centtro de la portería. Por ello desapareció la línea de once metros y se creó el “Área de Penalty” (Área Grande), tal como es actualmente, aunque todavía sin el “Área de Meta” (Área Pequqeña) y la media luna central.
En 1891 también se aprueba el uso de redes en las porterías.
En 1897 se anula el Fuera de Juego cuando el atacante sale desde su propio campo.
La Fédération Internationale de Football Association, FIFA (1904)
Desde finales del siglo XIX y, sobre todo, principios del XX los clubes y sociedades de Fútbol comienzan a extenderse por todo el mundo, hasta en Nueva Zelanda, y se hace necesaria la creación de un organismo internacional que integre a las asociaciones de fútbol de todos los países, actuando como institución que regule las competiciones a nivel mundial. Esta idea no resulta del agrado de las asociaciones británicas, especialmente de la Football Association.
Finalmente, el 21 de mayo de 1904, a propuesta de Robert Guérin, secretario de la Union Française des Sports Athlétiques, se convoca a todas las asociaciones de Fútbol a una reunión en la sede de dicha sociedad en París, acudiendo, además del representante francés, los de Francia, Bélgica, Suecia, Suiza, Dinamarca, Países Bajos y España. Alemania no envía representante, pero se adhiere a través de un telegrama. De esta convocatoria surge la fundación de la Fédération Internationale de Football Association (FIFA) como organización representante del Fútbol internacional, nombrándose a Robert Guérin como presidente y acordándose unos Estatutos provisionales.
En los Estatutos se determina básicamente el reconocimiento mutuo y exclusivo de las asociaciones nacionales presentes y representadas; la prohibición de que clubes y jugadores jueguen al mismo tiempo para diferentes asociaciones nacionales; el reconocimiento mutuo de las expulsiones dictadas por otras asociaciones y la organización de partidos en base a las Reglas de Juego de la Football Association.
Aunque las cuatro asociaciones británicas no ven con buenos ojos la creación de un organismo internacional, pues pudiera restar legitimidad a la IFAB, al año siguiente (1905) se integra la Football Association de Inglaterra.
Aceptación en FIFA de Escocia, Gales e Irlanda del Norte (1910-1911)
Aunque la FIFA es una organización que integra a las asociaciones de Fútbol de estados independientes, se hace una excepción con las asociaciones británicas por su consideración de socios fundadores de la IFAB, por lo que en 1910 se integran Escocia y Gales y en 1911 Irlanda del Norte.¡
Inclusión de FIFA en IFAB (1913)
La FIFA cada vez tiene más miembros asociaciados y va concentrando mayor legitimidad y poder en la regulación del Football Association. Esto hace que la dualidad entre la FIFA y la IFAB se vayan haciendo cada vez más confusa y complicada. Antes de que lleguen los inevitables conflictos de competencias, en 1913 se toma la decisión de integrar a FIFA en la IFAB como quinto miembro. En 1958 se determina la autoridad jerárquica de la FIFA en las decisiones de la IFAB. Actualmente cada una de las cuatro asociaciones británicas tiene un voto y la FIFA tiene cuatro, pero para poder sacar una propuesta adelante es necesario el voto de FIFA (cuatro votos inseperables) y el de, al menos, dos asociaciones, por lo que la FIFA tiene derecho de veto.
La IFAB se considera guardiana de la esencia original del Football Association, por lo que es bastante reacia a la modificación o alteración de las Reglas del juego.
En 1916 se constituye la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL) a partir de la organización de un Campeonato Sudamericano de Selecciones jugado en Argentina en conmemoración de la independencia de este país.
En 1930, la FIFA organiza el I Campeonato Mundial de Fútbol en Uruguay.
Periodicamente la FIFA publica actualizaciones de las Reglas del Juego aprobadas y autorizadas por la IFAB.
The Rules of de Games: ampliación de 14 a 17 Reglas del Juego (1938)
Iniciada la tercera década del siglo XX, el Fútbol ya se ha popularizado prácticamente por todos los rincones del mundo. Y aunque mantiene la esencia original, han ido surgiendo nuevas y más complejas situaciones, que obligan a una profunda revisión de las “14 Reglas”. El mayor inconveniente es de interpretación, pues las Reglas originales fueron redactadas en un lenguaje clásico de la Inglaterra victoriano y las diferentes traducciones resultaban confusas. La IFAB toma conciencia de la situación y desde 1936 inicia reuniones para la actualización de las Reglas del Juego, encargando la redacción al inglés Stanley Rous (posteriormente presidente de la FIFA desde 1961 a 1974).
En 1938 finaliza la revisión, que se concreta en una ampliación de 14 a 17 reglas. En realidad, en la práctica, ya venían siendo 17 reglas efectivas. En lo sustancial no hay grandes modificaciones, pues los cambios son, fundamentalemte, de redacción y estructurales, siendo el añadido más relevante la incusión de la media luna en la frontal del “Área de Penalty” para igualar la distancia de los jugadores en el lanzamiento de un penalty.
Las 17 Reglas, que siguen siendo las actuales, se concretan en las siguientes:
El terreno de juego.
El balón.
El número de jugadores.
El equipamiento de los jugadores.
El árbitro.
Los árbitros asistentes.
La duración del partido.
El inicio y la reanudación del juego.
El balón en juego o fuera de juego.
El gol.
El fuera de juego.
Faltas e incorrecciones.
Tiros libres.
El tiro penal.
El saque de banda.
El saque de meta.
El saque de esquina.
Puntualizaciones destacadas (1938-1997)
En 1954 se constituye la Union of European Football Association (UEFA) en Basilea (Suiza),
integrando a las diferentes Asociaciones de Fútbol de paises europeos.
En 1965 se permite realizar un cambio por lesión.
En 1970 se permite hacer dos cambios de jugadores durante el partido.
En 1976 se crean las Tarjetas para las sanciones disciplinarias, “Amarilla” como apercibimiento y “Roja” por expulsión.
En 1990 deja de ser Fuera de Juego si el atacante está en línea con defensor; y se sanciona con Tarjeta Roja (expulsión) al jugador que comete falta evitando una ocasión manifiesta de gol.
En 1992 se sanciona si el portero coge el balón con las manos tras pase de compañero (exepto cabeza). Posiblemente sea la introducción reglamentaria contemporánea que más ha influido en la dinámica del juego. La dinámica de las tácticas hacen que el juego sea cada vez más defensivo y, por ende, menos atractivo. Con la introducción de esta infracción se pretende evitar este exceso de juego defensivo. La nueva Regla ha tenido su efecto y ha provocado no sólo cambios en el juego, potenciando el juego de pase desde la defensa, sino que los porteros también sepan jugar con los pies para poder actuar ante los pases de sus compañeros.
En 1995 aumenta el número de cambios de dos a tres.
Actualización de las Reglas del Juego (1997)
En 1997 se dio el siguiente cambio importante de Reglas, donde el texto de las mismas fue aumentado en un 30%. Se mantiene la estructura y 17 Reglas, pero se trata, fundamentalmente, de incluir explicaciones y esquemas gráficos, todo con un carácter mucho más didáctico.
Al respecto de esta edición, el entonces presidente de la FIFA, João Havelange, quien sucedió a Rous en 1974 declaraba: «Incluso si en la actualidad el texto de Sir Stanley Rous puede llegar a considerarse hasta cierto punto obsoleto, el espíritu de su obra mantendrá su validez. El mayor tributo a este logro es precisamente el hecho de que su obra haya resistido el paso del tiempo. Sin embargo, estoy convencido de que como hombre de gran visión, Sir Rous habría aceptado que ha llegado el momento de actualizar su obra«.
Las últimas novedades destacadas
En 1998 se sanciona con Tarjeta Roja las entradas por detrás.
En 2008 se crean las figuras de los Árbitros Asistentes para las líneas de fondo y gol.
Esquema de la evolución de las Reglas del Juego del Fútbol:
1845 Reglas del Rugby.
1847 Reglas de Eton.
1848 Reglas de Cambridge.
1856 Reglas de
1857 Reglas de Shefflied.
1863 Reglas del Football Association.
1866 Cambio de las Reglas del Fuera de Juego.
1866 Colocación de una cinta entre postes como larguero.
1869 Libres Directos/Indirectos y Saque de Puerta.
1870 Se regula que cada equipo juega con once jugadores.
1870 Mención al Portero.
1871 Challenger Cup.
1873 Corner.
1874 Mención al Árbitro.
1875 Larguero.
1878 Unificación entre Football Association y Reglas de Shefflied.
1882 Saque de Banda con manos.
1883 British Home Championship.
1886 International Football Association Board (IFAB).
1888 Footbal League.
1891 Árbitro en campo y Jueces de Líneas, Penalty y Redes de Portería.
1897 No Fuera de Juego en campo propio.
1898 Las Reglas pasan de 14 a 17.
1904 Fedération Internationale de Football Association (FIFA).
1905 Aceptación en FIFA de Inglaterra.
1910 Aceptación en FIFA de Escocia y Gales.
1911 Aceptación en FIFA de irlanda.
1913 Inclusión de FIFA en IFAB.
1916 Fundación de la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL).
1920 No Fuera de Juego en Saques de Banda.
1925 No Fuera de Juego con dos defensores por delante del atacante en pase adelantado.
1930 I Campeonato Mundial de Fútbol.
1938 The Rules of the Games.
1954 Fundación de la Union of European Football Association (UEFA).
1965 Se permite un cambio por lesión.
1970 Se permite hacer dos cambios de jugadores durante el partido.
1976 Se crean las Tarjetas para las sanciones disciplinarias.
1990 No Fuera de Juego si el atacante está en línea con penúltimo defensor; y Tarjeta Roja por falta evitando ocasión manifiesta de gol.
1992 Infracción si el portero coge el balón con las manos tras pase de compañero (exepto cabeza).
1995 Aumenta el número de cambios de dos a tres.
1997 Desarrollo de las Reglas del Juego.
1998 Tarjeta Roja a las entradas por detrás.
2008 Árbitro Asistente para las líneas de fondo y gol.
Más Información en:
RELAÑO, A. (2010). 366 historias del Fútbol mundial. Ed. Martínez Roca.
YOGUI, R. (2008). El fútbol del fututo. Ed. Libros en la Red.
MARTÍNEZ DE LA FUENTE, V. y CASTELLANO, J. (2008). En “Fútbol e Innovación” de Castellano J. (editor). Wanceulen Editorial Deportiva.
BUENO, J.A. y MATEO, M.A. (2012). Historia del Fútbol. Ed. EDAF.
GALEANO, E. (1995): El fútbol a sol y sombra. Ed. Siglo XXI.
https://elfutbolymasalla.com/wp-content/uploads/2016/03/larguero-de-cinta.jpg540960Manuel Granado Palmahttps://elfutbolymasalla.com/wp-content/uploads/2021/10/logo-efyma.pngManuel Granado Palma2016-03-13 11:57:132020-04-09 23:19:53Historia de las Reglas del Fútbol