Cádiz CF -Japón
Uno de los partidos más curiosos de la historia del Cádiz CF es el que le enfrentó el 21 de septiembre de 1993 a Japón, no a todo el país, sólo a la Selección de Fútbol, resultando ganador el Cádiz CF por 2 a 1.
En la temporada 1992/93 el Cádiz CF descendía a Segunda División, tras ocho temporadas seguidas en Primera, donde había jugado once de las dieciséis últimas temporadas. Era la mejor época deportiva del club. La temporada en Segunda se encara con el único objetivo del ascenso, como ya se había hecho en temporadas anteriores. Sin embargo, no se comienza nada bien. El primer partido oficial es de Copa, empatándose a cero en Tomelloso y luego, ya en Liga, se pierde en Carranza frente a la SD Compostela por 0 a 2 y en Mallorca por 4 a 0. La situación parece enderezarse al eliminar al At. Tomelloso y ganar al At. Marbella, aunque con muchas dificultades. En este contexto de dudas y desconfianza en el equipo, entrenado por Colin Addison, se afronta un partido amistoso muy peculiar: frente a la Selección de Japón.
La selección japonesa estaba haciendo una gira por Europa para preparar los partidos cruciales de clasificación para el Mundial ’94 de EE.UU. En Japón el fútbol estaba tomando un importante auge popular y se daban los primeros pasos del profesionalismo, incluso importando jugadores brasileños, como Ruy Ramos, nacionalizado para ser el estandarte de la selección. Prueba de este interés, es la llegada a Cádiz de más de ciento cincuenta periodistas japoneses para cubrir el partido, colapsando el palco de prensa y siendo uno de los atractivos del curioso aficionado cadista. Tanto era el interés del partido, que incluso lo grabaron para luego ser emitido en diferido en diferentes cadenas de televisión japonesa.
El Cádiz CF, por su parte, no se toma el partido con demasiado interés, pues en pocos días tiene una importante cita liguera en Toledo. Prueba de esta falta de interés es que ni siquiera se hacen entradas propias para el evento, sino que se aprovechas las sobrantes de la Liga de dos años atrás para imprimir los datos del partido. Tampoco tiene mucho interés en la prensa, pasando prácticamente desapercibido; ni en los aficionados, salvo para Titopá Giráldez, que vive el partido con una especial intensidad y que quedará grabado en su memoria por el resto de su vida, guardando aquella entrada como un tesoro.
El partido se juega la noche del martes 20 de septiembre de 1993, con presencia de unos mil quinientos aficionados en las grada de Tribuna, que es la única que se abre. Por el Cádiz CF se alinean: Tubo Fernández; Fernández, Luis Carlos (Aceco, 83’), Feliciano (Alfonso, 46’), Mateos (Verastegui, 46’); Sergio García (Bermúdez, 73’), Juan Carlos, Gustavo Acosta; Fali Montes, Paquito Aragón (Lazareno, 83’) y Quino (Luina, 83’). Además de algunos jugadores del Cádiz CF “B”, llaman la atención dos jugadores a prueba, el hispano francés Sergio García y el brasileño Luis Carlos. El primero se terminaría quedando, aunque con nula aportación. Por el equipo nipón juegan: Matsunaga; Otake, Katsuya, Horiike, Ihara, Fukuda, Ruy Ramos, Kazu Miura, Yoshida (Haswegawa, 46’), Moriyasu y Takagi. Además del mencionada Ramos, también juega un histórico del fútbol mundial, Kazuyoshi Miura, que actualmente sigue jugando con 52 años, teniendo el record en 1917 de ser el goleador con mayor edad del fútbol profesional. Pero por lo que realmente ha pasado a la historia es por haber sido el inspirador del personaje de Oliver Atom de la mítica serie de animación manga “Súper Campeones”.
En cuanto al partido, dirigido por el árbitro del Colegio Gaditano, Álvarez García, no tuvo demasiada historia, por el bajo nivel del equipo nipón. A los 27 minutos se adelantaba el Cádiz CF con un gol del malagueño Quino, pero dos minutos después empataba precisamente Miura. Otro gol de Quino apenas iniciada la segunda mitad dejaba el marcado en el 2 a 1 definitivo.
Después de este anecdótico partido, el futuro reservaba grandes desastres para ambos combinados. El Cádiz CF no sólo no ascendería a Primera, sino que descendería a Segunda “B”, donde permanecería durante nueve temporadas; y a Japón le esperaba otra tragedia deportiva. Se jugaba la clasificación para el Mundial, donde iría por primera vez, en Doha (Catar) en una liguilla con seis selecciones; y en la última jornada se enfrentaba a Iraq, bastándoles el empate frente a un rival ya eliminado. Ganaba por 2 a 1, pero en el descuento encajaba un gol y quedaba eliminado, pasando el partido a la historia del fútbol japonés como “la tragedia de Doha”.
¡Vaya historia! Gracias por compartirla, me ha encantado. Ojalá hubiera tenido edad suficiente para asistir a ese partido. ¡Kazu Miura en Carranza! 😀
viva er cadi cojone
Oé!
Gracias.